CEOE CEPYME Cuenca analiza la reforma laboral una vez se han cumplido tres años de su puesta en marcha y señala algunos aspectos positivos como permitir a las empresas adaptarse a las circunstancias económicas, aliviar el trámite extintivo cuando esas circunstancias se ponen de manifiesto, y adecuar el marco legal a la localización de cada entidad, en su zona, su ámbito de actuación y las propias particularidades de su entorno. Así apuntan que es difícil entender que una negociación colectiva nacional afecte por igual a la gran empresa que a la pyme, y la reforma lo ha hecho posible.

Además indican que hay algunos puntos que incrementan la seguridad jurídica, pues el empresario tenía que acreditar una serie de datos y acometer costes en su maltrecha economía para poner de manifiesto lo que legalmente tenía registrado, y debía presentarlo en los organismos públicos –registro mercantil, impuestos, etc- resultando, antes de la reforma, en una dificultad judicial adicional. Ahora, entienden que la reforma agiliza tal proceso y determina –si se trata de razones económicas- cuando es posible y cuando no llevar a cabo extinciones bajo tal modalidad, con lo que no hay discrecionalidad posible, ni interpretación en la mayoría de los casos.

En el aspecto negativo, la Confederación de Empresarios lamenta que, sin ser un efecto directo de la reforma laboral, sino un cambio adicional en enero de 2014, se está produciendo un perjuicio para los empresarios, como se decía en muchísimos casos con su economía maltrecha, la eliminación del pago que hacía el Fondo de Garantía Salarial en esos supuestos de extinciones por causas económicas, y que ayudaban sobremanera a las pequeñas empresas (sólo se abonaba a las de menos de 25 trabajadores). Sin duda analizan que la pérdida de esa importante ayuda contrasta con el contenido de la reforma laboral de 2012.

Contratación

En lo referente a la contratación señalan que se están tomando medidas que benefician a determinados tipos de colectivos, aunque no a todos, centrándose en aquellos con mayor desempleo, por lo que la valoración en tal sentido es positiva.

La Confederación de Empresarios lamenta en este momento una multiplicidad de contratos que supone una maraña difícil de consensuar con la practicidad que necesitan las empresas”

En este punto señalan que es necesario bajar el coste social que tienen las empresas, no en función de según qué circunstancias, sino de forma genérica, destacando que si se da este paso se conseguirá un mayor índice de empleabilidad y será una buena medida contra el paro.