La Confederación de Empresarios de Cuenca reseña la aportación que las empresas y autónomos del mundo de la cultura están haciendo a nuestra economía, con incidencia incluso en el PIB.

Así, con la tendencia creciente de los últimos años, este sector ha conseguido situarse en un porcentaje del 3,5 % del Producto Interior Bruto con empresas referentes nacionales e internacionales. 

Además del tamaño de algunas de sus empresas que son grandes plataformas del entretenimiento, CEOE también destaca que en España son más de 150.000 las que generan movimiento económico por este sector.

Además, otro dato a destacar sobre el progreso de la actividad cultural y su reflejo en la economía es este sector daba empleo a más de 770.000 personas en 2024, un incremento del 6,6% interanual.

Una vertiente más modesta, es que siete de cada diez empresas del sector cuentan con tan solo un trabajador, muy por debajo de países como Estados Unidos y China donde la cultura es industria.

Para CEOE CEPYME Cuenca este hecho es una gran noticia y además está teniendo repercusión en nuestra provincia donde han surgido en los últimos tiempos algunas compañías del mundo de la producción o la edición, así como del arte, que están dinamizando nuestra economía.

En este punto, destacan que las sinergias que están estableciéndose entre la cultura y la empresa propician actividad como puede ocurrir en nuestra provincia no solo con las empresas generadas, sino con rodajes, festivales o espectáculos.

Agenda Estratégica

Para consolidar este hecho, CEOE cuenta con una Dirección de Turismo, Cultura y Deporte y una Comisión de Cultura que trabaja en aspectos como reconocer a la cultura como generador de empleo y competitividad, reforzar el papel e las empresas como actores culturales, poner el valor el impacto territorial de la cultura, fomentar la creatividad y la gestión y proyectar la cultura empresarial española en el ámbito internacional.

Entre otras cuestiones, se ha observado que se ha superado el modelo clásico de mecenazgo y ahora se cuenta con empresas competitivas que asumen el papel de creadoras.

Incluso, con las nuevas herramientas como la inteligencia artificial, está abordándose nuevas vertientes, asumiendo los nuevos creadores el papel protagonista, pero como pate del tejido productivo.