CEOE CEPYME Cuenca alerta de la dificultad empresarial que hay en este momento en el tejido productivo para capitalizar beneficios y destinarlos a otros aspectos dentro de las compañías.

En este sentido, elementos como el incremento de costes laborales impide que haya margen suficiente para poder realizar nuevas inversiones y apostar por las contrataciones.

Es más, en un momento de incertidumbre como el que nos encontramos, estos aspectos, no solo impiden que los beneficios e incremento de patrimonio, sino que ponen en peligro la continuidad de la empresa.

A estos costes laborales tenemos que añadir la excesiva normativa que se opone de manera clara a la actividad empresarial y al desarrollo diario de las empresas.

Estos dos aspectos como son el incremento de los costes de distinto índole como el exceso burocrático que sufren las diferentes etapas de la empresa, son aspectos que perjudican de manera clara su actividad, crecimiento y consolidación.

Otros problemas

Otros problemas que sufren las empresas son la morosidad, el absentismo laboral, o la dificultad para poder cubrir algunas vacantes en el seno de las empresas.

Todos estos aspectos suponen una pérdida de productividad de las empresas que son un lastre para al crecimiento empresarial, que, a su vez, hace que las empresas sean menos sólidas para poder superar los distintos problemas y retos a los que se enfrentan.

Y es que el crecimiento de las empresas es un reto para el tejido productivo, puesto que hace más competitiva nuestra economía frente a los distintos vaivenes.