CEOE CEPYME Cuenca vaticina que el año 2023 cerrará con una tendencia inflacionista, todavía por encima del 2% que es lo que se estima como unos precios controlados.

La Confederación de Empresarios de Cuenca ha analizado los datos del Índice de Precios al Consumo publicados por el Instituto Nacional de Estadística correspondientes al mes de noviembre y, aunque muestran una moderación mensual, los datos interanuales se acercan al 3%.

Con estos números, CEOE CEPYME Cuenca concluye que, en noviembre, debido fundamentalmente a los costes de la energía, se produce una moderación de precios, pero que hay subsectores como alimentos y bebidas o bebidas alcohólicas y tabaco que siguen con una inflación muy alta y no suelen moderar su coste en diciembre por Navidad, de ahí que se espere un balance anual con fuerte inflación.

Por este motivo, la Confederación de Empresarios señala que es importante que se controlen los precios porque está perjudicando a las familias que ven como se encarece la cesta de la compra, pero también a las empresas que son perjudicadas directamente por un retroceso del consumo debido a esta escalada de precios.

Además, recuerda CEOE CEPYME Cuenca que para controlar la inflación la política de los bancos centrales es mantener altos los tipos de interés, lo que encarece los créditos y hace más difíciles estos préstamos, incidiendo de manera directa en la actividad empresarial.

IPC interanual

El Índice de Precios al Consumo en la provincia de Cuenca en noviembre de 2023 crece un 2,9% con respecto al mismo mes del año pasado, impulsado principalmente por los alimentos y bebidas que se encarecen un 9,5% y las bebidas alcohólicas y tabaco que lo hacen en un 7,2%.

También muestran una fuerte inflación otros subsectores como la enseñanza que aumenta su coste en un 5,7%, los restaurantes y hoteles en un 5.6% y los muebles y artículos del hogar con un 4,6%.

Esta fuerte inflación hace que el balance interanual tan solo se reduzca en una décima sobre lo que se registraba en octubre (3%), a pesar de que los costes de la energía se han reducido como ocurre con los gastos de vivienda como electricidad, gas y oros que bajan un -7,9% o los combustibles asociados al transporte que se abaratan en un -0,6%.

Es precisamente el hecho de que los costes energéticos estén bajando lo que produce que la inflación en la provincia esté por debajo de la que se registra en Castilla-La Mancha (3.4%) y a nivel nacional (3%), pues al tener menor tejido productivo sectores como combustibles o electricidad tienen más influencia en el IPC.

En el último mes precisamente han sido estos precios de la energía los que han provocado un descenso de los precios del -0,4%, por encima del -0,3% de España y Castilla-La Mancha, influenciados claramente por el abaratamiento de los gastos de electricidad, gas o agua de la vivienda en un -2.0% o de los combustibles asociados al transporte en un -1,5%, mientras que los alimentos tan solo se encarecen un 0,4%.